Guion: Fundamentos

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La Prueba Y El Testimonio De La Iglesia Primitiva

PROGRAMA 1

FUNDAMENTOS

STEVE: Actualmente existen más de 5 mil millones de personas vivas en la tierra.

Casi un tercio de éstas, o aproximadamente 1.6 mil millones, se identifican como cristianos.

En nuestros días la fe cristiana está viva en cada continente y en cada gran área geográfica del mundo con más de 22,000 expresiones religiosas distintas.

Pero había una fe que la mayoría de la gente simplemente no deseaba en el mundo, aquí en Jerusalén, hace casi 2000 años. Su fundador fue asesinado y sus seguidores, que fueron conocidos como "cristianos", ocasionalmente fueron perseguidos y condenados a muerte. El imperio político más poderoso que el mundo jamás había conocido, utilizó su vasta maquinaria legal y administrativa en un esfuerzo extenuante para suprimir esta nueva fe avivada. Pero falló.

NIGEL: En esta serie de programas, estudiaremos a la iglesia cristiana en su período inicial, cuando se encontraba bajo ataque, un período que abarca casi 300 años-- hasta el Edicto de Milán en el año 313, cuando finalmente le fue otorgada a la iglesia su estatus legal. Esta es una de las historias más increíbles de toda la historia de la humanidad.

STEVE: Analizaremos los fundamentos de la iglesia y cómo se propagó, también las acusaciones lanzadas en contra de ella, la persecución que amenazaba con destruirla, las historias de los mártires que dieron sus vidas en lugar de negar su fe, y la transición en virtud de la cual el cristianismo de los primeros 300 años se convirtió no sólo en una religión legal sino finalmente en la fe oficial del Imperio Romano.

LOGOTIPO DE LA SERIE

RUSSELL: A medida que avancemos a través de esta serie, nos verás adentrarnos en las personificaciones y representar los papeles de algunos de los principales personajes de esta historia que abarca casi 300 años.

JANE: Creo que encontrarás un drama impresionante, es una historia llena de peligro y suspenso. Ésta historia hace frente a las preguntas y problemas de la vida que encontramos en cada periodo.

NIGEL: Nosotros seremos tus guías a medida que averiguamos cómo era el cristianismo mucho antes de que tuviera mucho de lo que identificamos en la Iglesia de nuestros días.

JANE: Quizás una buena forma de empezar podría ser preguntando, "¿Qué es una iglesia?" ¿La iglesia es en realidad un edificio? ¿Aún seguiría siendo una iglesia si quitáramos los himnarios o la Biblia? ¿Qué pasaría si se eliminara el órgano? ¿Qué pasaría si quitáramos el púlpito y los ornamentos de los sacerdotes?

RUSSELL: La respuesta a todas las preguntas que hace Jane sería un inmediato "sí", si fueras un cristiano que vive en el período del cristianismo primitivo que estamos analizando en este programa.

NIGEL: Los primeros cristianos no disponían de ninguna de las cosas en las que pensamos cuando pensamos sobre la iglesia de hoy.

RUSSELL: Ellos no tenían edificios para las iglesias. No tenían distintas denominaciones o editoriales o grandes organizaciones burocráticas o una jerarquía compleja.

NIGEL: Pero aun así eran una iglesia. La iglesia no se trataba de edificios sino de personas. Tenían dos cosas que consideraban de suma importancia--irremplazables, de hecho--tenían una fe y una comunión.

JANE: Y ambos elementos estaban centrados en aquel a quien consideraban su fundamento.

STEVE BELL: El cristianismo inicia con Jesús de Nazaret y con el pueblo judío en la Palestina del siglo primero. Aunque nadie en la historia ha sido representado por grandes artistas más que Jesucristo, de cuyo parecer realmente no se tiene un conocimiento específico. En todo el Nuevo Testamento no existe indicio de su estatura, su constitución o de cualquier otra característica física. Sin embargo, la pregunta que se formuló cuando caminó en esta tierra es la misma que se ha venido formulado desde entonces--¿Quién es Jesús?

NIGEL: No tenemos ninguna biografía completa sobre la vida de Jesús, en términos de las expectativas modernas de la biografía. Pero hay algunas cosas que sabemos sobre él, más allá de toda duda razonable. Incluso aquellos que no lo siguen o incluso aquellos que lo desprecian, admitirían que por lo menos se puede decir mucho acerca de él.

STEVE: *Jesús nació en una familia humilde.

*Sin embargo él provenía de un distinguido árbol genealógico, incluso con normas judías cuidadosas.

*Sus enseñanzas fueron percibidas como extraordinarias, y se ganó la reputación de alguien que podía obrar maravillas y milagros.

*Su mensaje, anunció el inicio de un orden completamente nuevo, resumido en la frase "El Reino de Dios" el cual, a pesar de no haber sido inmediatamente reconocido o comprendido, sin embargo, fue inevitable.

*Jesús reunió en torno a él a un grupo de seguidores que en su mayoría eran personas comunes de trabajo, sin embargo, él los instruyó para ser sus mensajeros.

*Él causó una gran controversia y suscitó una oposición vehemente.

*Fue condenado por los líderes judíos y crucificado por las autoridades romanas.

*Sus discípulos creyeron y testificaron que al tercer día él resucitó de entre los muertos y que se reunió, habló y comió con ellos.

*Los seguidores de Jesús estaban convencidos de que fue Dios quien había resucitado a Jesús de entre los muertos, validando sus afirmaciones y enseñanzas; además creían que Jesús era el salvador de la humanidad divinamente designado, el Señor a quien todos le debían su fe, su lealtad y su obediencia total.

*Y no cabe duda de que esos seguidores pronto creerían que llevarían este mensaje a todo el mundo a cualquier precio. Llamarían a todos los pueblos al arrepentimiento y a creer en Jesús. Y sabemos que ellos adoptaron esta palabra con una energía y fortaleza extraordinarias mucho más allá de los confines de su patria.

STEVE: Jesús fue judío y mucho de su ministerio se encontraba en la sinagoga de aquí en Capernaúm de Galilea, donde él adoraba y ministraba. De hecho, se cree que las ruinas de esa sinagoga yacen justo debajo de este avistamiento. Los primeros discípulos o apóstoles de Jesús también eran judíos. Ellos no se veían a sí mismos formando ninguna nueva religión ni un grupo disidente del judaísmo. Por el contrario, ellos se veían a sí mismos fieles a su herencia judía y como parte del pueblo de Israel; ellos también creían en las promesas dadas a Israel por Dios a través de los escritos que ahora comúnmente se denominan como el Antiguo Testamento. Así, en los primeros años después de que Jesús los dejó, sus seguidores continuaron en el interior de la comunidad judía. Eran muy activos en la sinagoga, testificando y polemizando con sus compañeros judíos acerca de quién era Jesús y del llamado que le hacía a Israel.

Las comunidades de los judíos fueron dispersadas por completo por el Imperio Romano.  Se necesitaban diez hombres judíos para establecer una sinagoga, así se formaron sinagogas dondequiera que iban. La sinagoga ofrecía un escenario ideal para difundir la palabra de Jesús mientras los discípulos se trasladaban hacia círculos más amplios. En ese momento las conversiones al judaísmo eran más comunes de lo que lo son hoy en día. Los no judíos podían venir y adorar en las sinagogas, y aquellos que no se convertían plenamente en judíos todavía podrían encontrar en la vida de la comunidad un lugar para compartir. Esos adoradores eran conocidos como "gentiles" y muchos resultaron ser receptivos al mensaje de Jesús.

NIGEL: Pero la palabra era para todos. Las instrucciones de despedida de Jesús fueron acerca de ir por todo el mundo--y el mundo para ellos significaba el poderoso Imperio Romano. 

STEVE: el Imperio Romano fue el imperio más grande jamás conocido de la antigüedad Occidental con unos 50 a 60 millones de habitantes. Casi tantas personas como las hay actualmente en Alemania o en Gran Bretaña -- o aproximadamente un quinto de la población de los Estados Unidos. Incluían a todas las naciones cercanas al Mar Mediterráneo y también parte de los Países Bajos, Bélgica, parte de Alemania Occidental, Austria y Suiza, y la mayor parte de Checoslovaquia, Hungría, Bulgaria, Rumania, Inglaterra, Gales y Escocia Meridional.

Roma, con 1.5 millones de habitantes, era la capital y el centro de este vasto dominio geopolítico. Roma era LA ciudad, pero dondequiera que los Romanos gobernaban, construían nuevas ciudades si éstas aún no existían. Así, el mundo en el que se propagó el cristianismo primitivo fue primordialmente un mundo urbano. Después de Jesús, los apóstoles formaron la columna vertebral de la iglesia. Casi todas las tradiciones cristianas de hoy aún ven a los Apóstoles como a aquellos a quienes les fue confiado el tesoro original de la fe y por supuesto, algunos de los nombres de los apóstoles se han convertido en los nombres más comunes de los hombres en todo el mundo occidental. ¿A cuántos hombres conoces con el nombre de Juan, Santiago, Pedro, Tomás, Felipe, o Andrés? Y estos nombres comunes vinieron de hombres bastantes comunes. Cinco de ellos eran humildes pescadores de hombres. Trabajaron aquí en el Mar de Galilea, y fue cerca de esta misma orilla que Jesús vino y los invitó a renunciar a su comercio y a seguirlo.

NIGEL: ¿Qué sucedió con este grupo más bien común al que se le asignó la tarea más extraordinaria después de que Jesús dejó la tierra?

STEVE: El Nuevo Testamento nos da cuenta de la muerte de dos de los apóstoles

-- Judas y Santiago.

Judas, quien traicionó a Cristo a cambio de treinta piezas de plata, se suicidó al colgarse.

Santiago, hijo de Zebedeo, fue condenado a muerte por espada, probablemente decapitado en Jerusalén alrededor del año 44 DC. Según la tradición, murió después de predicar el Evangelio en España.

Andrés fue reportado haber viajado a Escitia, la región norte del Mar Negro, que ahora forma parte de la Unión Soviética. Es más certera su predicación en Asia Menor (Turquía moderna) y en Grecia, donde se dice que fue crucificado.

Tomás, "el incrédulo", probablemente estuvo más activo en la zona oriental de Siria. La tradición lo enmarca predicando tanto en el lejano oriente como en la India, donde los antiguos cristianos de Marthoma lo veneran como su fundador.

Felipe, como la tradición lo registra, predicó el evangelio en Hierápolis en Asia Menor, donde convirtió a la esposa del procónsul romano. En represalia, su marido detuvo a Felipe y cruelmente lo condenó a la muerte.

Mateo, también conocido como Levi, se le da el crédito de haber escrito el Evangelio que lleva su nombre. Las diferentes tradiciones lo ubican predicando el Evangelio en zonas tan alejadas como Persia y Etiopía.

Bartolomé, también, la tradición le atribuyó viajes misioneros amplios: a la India con Tomás, de vuelta a Armenia, también a Etiopía y al sur de Arabia. Hay varios relatos de la manera en la que murió como mártir.

Santiago, el hijo de Alfeo, es uno de los al menos tres Santiagos mencionados en el Nuevo Testamento, y existe cierta confusión en cuanto a quién es quién. Pero se considera que este Santiago ministró en Siria, y el historiador judío Flavio Josefo dice que fue apedreado y luego golpeado hasta la muerte.

Simón el Zelote, por lo que la historia cuenta, se dirigió hacia Persia y fue asesinado después de negarse a darle sacrificio al dios del sol.

Matías fue el apóstol elegido para reemplazar a Judas. La tradición lo envía con Andrés a Siria y enmarca su muerte a través del fuego.

El apóstol Juan es quizás el único de la compañía que se cree que murió de manera natural en la vejez. Él fue el líder de la iglesia del área de Éfeso y se dice que cuidó de María, la madre de Jesús, en su casa. Durante la persecución en el reinado Domiciano, a mitad de los años 90's, fue enviado al exilio a la isla de Patmos en el Mar Egeo. Allí le fue acreditado haber escrito el último libro del Nuevo Testamento, el Apocalipsis de Juan.

NIGEL: Si ellos fueron a todos los lugares que aseguran, entonces podemos ver que los apóstoles abarcaron una amplia extensión, llevando el mensaje de Jesús.

STEVE: Pero subrayemos una vez más que no es posible diferenciar en dónde terminan los hechos históricos y en donde comienza la leyenda fantástica. Por lo general se considera que en la mayoría de los casos existía cierta verdad que daba origen a las leyendas, la cual se embellecía durante un largo período de tiempo.

Pero tenemos más información, considerada confiable, sobre dos de los apóstoles, Pedro y Pablo.

CARSTEN THIEDE: Después de la resurrección, Pedro, el hombre que había negado a Jesús, fue restablecido por el Señor resucitado en el Mar de Galilea. Desde entonces, Pedro es la roca, el pilar de la iglesia primitiva. Él es su primer orador público, su primer evangelista. Él los defiende ante el Sanedrín. Él, por así decirlo, instituye viajes misioneros. Él es el primero en comenzar una misión con los Gentiles, mucho antes de Pablo. Cuando Pablo llega finalmente a Jerusalén, él, Pedro, es su maestro. Él le cuenta sobre la historia de Jesús, sobre los inicios de la iglesia. Por último, él demuestra ser un buen administrador cuando sale de Jerusalén hacia Roma.

DAVID WRIGHT: Pedro es uno de los primeros cristianos mayormente conocidos. Él fue un hombre tal como lo somos nosotros. Fue un discípulo, un apóstol y un mártir. Un discípulo de Jesús, un Apóstol que predicó y declaró el Evangelio y que sentó las bases de la iglesia primitiva en Jerusalén, un mártir en Roma, probablemente junto con Pablo bajo el gobierno de Nerón. Sin embargo, en todas estas tres funciones lo más importante fue lo que confesó: cuando fue el primero en reconocer a Jesús como el Mesías, quien fue prometido; cuando les declaró el mismo mensaje a los judíos reunidos en Pentecostés y durante los días que siguieron acerca de que Jesús era realmente el Cristo que había de venir; y la manera en la que murió en Roma, fiel a esa confesión hasta el último momento.

NIGEL: El apóstol Pablo no fue uno de los doce apóstoles originales de Jesús, pero ciertamente fue el más grande misionero de Cristo que ha existido.

STEVE: Como un judío devoto, Pablo había sido un perseguidor férreo de la iglesia primitiva, pero luego tuvo una experiencia de camino a Damasco, en la que Pablo afirmó que Jesús mismo se le había aparecido. Pablo se convirtió en un hombre obsesionado en una tarea en la vida: llevar el Evangelio de Cristo a tantas personas como fuera posible, sin tener en cuenta lo que iba a sufrir personalmente. Durante uno de sus tantos encarcelamientos, Pablo le compartió su celo, a través de una carta, a su joven discípulo Timoteo.

PABLO (dramatización): Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos, pero que ahora ha sido manifestada por la aparición de nuestro Salvador Jesucristo, el cual quitó la muerte y sacó a luz la vida y la inmortalidad por el evangelio, del cual yo fui constituido predicador, apóstol y maestro de los gentiles.

STEVE: El patrón de Pablo era ir a las sinagogas. Pero también enseñó y predicó en las calles, y en las plazas, en el Areópago, y en cualquier lugar en el que pudiera ser escuchado. Aquí están registradas las rutas de sus tres viajes misioneros. Simplemente a todo lugar al que Pablo iba, algunos respondían positivamente convirtiéndose en discípulos de Cristo. Pero inevitablemente hallaba resistencia en otros. Iba a ser arrestado, golpeado o apedreado antes de ser expulsado de la ciudad.

Pablo ayudó a la iglesia a comprender la universalidad de la fe, mejor que cualquier otro. Y esto lo hizo participar en una intensa polémica con los demás Apóstoles, incluyendo un enfrentamiento con Pedro, pero en última instancia, le abrió las puertas a los Gentiles para convertirse en participantes plenos de la comunión de Cristo y distinguió aquellas partes de la herencia judía que debían conservarse de aquellas que eran opcionales o que podían reemplazarse con la venida de Cristo.

Finalmente, Pablo terminó en Roma, donde tradicionalmente se dice que fue decapitado fuera de los límites de la ciudad.

DAVID WRIGHT: Es fácil pasar por alto la enorme contribución que Pablo hizo a la iglesia cristiana primitiva. Uno podría preguntarse, realmente en que se habría convertido la iglesia de no haber sido por Pablo, porque existieron presiones que habrían mantenido el nuevo movimiento al interior del judaísmo. Y sobre todo fue Pablo aquel que vio con mayor claridad lo que nadie más pudo ver, que la nueva fe no podía estar confinada solamente al interior de los límites del judaísmo. Él habló del misterio que le había sido dado para declarar. Ese misterio era un secreto a voces acerca de que el Evangelio de Jesús era para todos los pueblos. Pablo era un hombre de dones notables. Evangelista, maestro, hacedor de milagros, profeta, escritor (muchos de los escritos del Nuevo Testamento provienen de Pablo), pensador teológico, pero lo que me gustaría destacar es que fue un estratega, un visionario, alguien que vio que el Evangelio tenía que liberarse de requisitos como la circuncisión judía y la observancia de la ley, si realmente iba a ser atractivo para las personas del mundo Romano.

STEVE: No fue hasta mucho después de la muerte de Pablo que los cristianos empezaron a comprender más claramente que eran una comunidad distinta del judaísmo. Pero, al mismo tiempo, la iglesia todavía pensaba sobre sí misma como el verdadero Israel y la heredera del pacto de Dios prometido a Israel.

Un paso importante en esta transición puede observarse en los eventos asociados con la revuelta judía en contra de los romanos en el año 66 DC. Eusebio, el primer gran historiador de la iglesia, escribiendo a comienzos del siglo IV, informa que los cristianos de Jerusalén eran constantemente hostigados por los judíos, y muchos salieron de Jerusalén. Cuando estalló la revuelta judía, los demás cristianos no se aliaron con los judíos, sino que huyeron a Pella, una ciudad de Transjordania. En el año 70 DC, las fuerzas romanas dirigidas por Tito, hijo del emperador, atacaron y capturaron a Jerusalén y destruyeron el templo. Hoy solo quedan restos como estos, el muro occidental o muro de las lamentaciones, que todavía es visitado por los devotos como el sitio más sagrado del judaísmo.

Una banda de Zelotes judíos había escapado y se había refugiado en el fuerte natural de Masada. El 2 de mayo, del año 73, los judíos atrincherados aquí, sumando casi 1,000 personas, se suicidaron antes de ser capturados o de volver a ser sometidos por los romanos. El fracaso de la revuelta y la destrucción del templo, fueron los grandes desastres para el pueblo judío; sin embargo, encontraron la forma de reorganizar su vida religiosa en torno a la Ley Judía.

La división entre cristianos y judíos se hizo más profunda a medida que el centro del movimiento cristiano pasó a otras ciudades fuera de Jerusalén. A finales de este siglo, los judíos incluso habían excluido a los cristianos de las sinagogas al cambiar sus oraciones litúrgicas para añadir una maldición sobre los herejes.

RUSSELL: Posterior a la muerte de los apóstoles, la fe se practicó por aquellos que habían sido enseñados por ellos y por sus colegas. Pero ya no encontramos misioneros de la talla y de la eficacia de Pablo a la cabeza del liderazgo.

JANE: En realidad no hay muchos registros que puedan decirnos cómo se propagó la fe o quién la difundió.

RUSSELL: Recuerda que aproximadamente hasta el año 312 la iglesia había permanecido sin licencia o registro, y muy pronto el Emperador Nerón a principios del año 60 AC la consideró una "religio prava:" que significa, una religión depravada o maligna, lo cual no le otorgaba ningún estatus jurídico y a menudo era considerada como una enemiga, tanto para el estado como para el pueblo.

NIGEL: Estas no eran el tipo de personas a las que se les erigen monumentos o de quienes se hace una celebración de artes públicas para recuerdo en la posteridad. O, si lo haces, es más de forma ridícula como en esta pieza de grafiti de la pared de un hogar del Monte Palatino, en Roma, que, por cierto, es la primera representación conocida de la crucifixión de Cristo. Aquí puedes ver el cuerpo de un hombre colgando de la cruz con la cabeza de un asno. Las palabras de burla escritas debajo: "Alexamenos adora a su dios".

JANE: Sin embargo, sabemos que la fe se propagó como el fuego, abriéndose paso a lo largo de todo el Imperio Romano.

RUSSELL: Ahora detente y piensa en lo absurdo de la tarea: un pequeño grupo en un remoto rincón de un poderoso imperio, un grupo considerado una pequeña secta dentro del judaísmo (y los judíos no eran muy bien apreciados en todo el imperio), este grupo se establece para convencer al mundo de su fe.

NIGEL: Ellos predican con compromiso sobre Aquel que ha muerto como un criminal odiado-eso ya es bastante extraño-, pero también afirman que este mismo personaje resucitó de entre los muertos y está vivo hoy a través de Su Espíritu Santo. El mundo al cual ellos hablan está inmerso en una lealtad feroz de tradiciones y religiones locales heredadas.

JANE: Y no era como si los cristianos le estuvieran pidiendo al mundo que dejaran un espacio para un Dios más--una fe adicional que pudieran practicar en privado. Los romanos realmente eran muy tolerantes. Les pudieron haber dado cabida.

RUSSELL: No, los cristianos se presentaron diciendo que su Dios era el único Dios verdadero, que todos estaban obligados a arrepentirse, cambiar sus caminos pecaminosos y seguir al Cristo proclamado como el Señor del cielo y de la tierra.

JANE: Ellos se sentían comprometidos por una convicción inquebrantable de que Jesús era el Señor y de que tenían el deber de llevar su evangelio a todo el mundo.

STEVE: El acueducto aquí en Cesarea aún permanece como un símbolo visible del poder Romano. Sin embargo, las condiciones en el imperio al inicio del movimiento cristiano se adaptaron mejor para la propagación de la fe que pretendía ser para todas las personas, que en cualquier otro momento de la historia de la humanidad. De hecho, el historiador Cristiano Eusebio, escribiendo en el siglo IV desde aquí en Cesarea, afirmaba que Dios había preparado providencialmente al Imperio Romano y el entorno cultural que éste proporcionó para la difusión del Evangelio. Y aun antes, el teólogo Tertuliano vio al imperio y al emperador como agentes de Dios para preservar a la sociedad. Él hizo esta sorprendente afirmación alrededor del año 200.

NIGEL como TERTULIANO: "Debemos respetar al emperador como el elegido de nuestro Señor. Por lo tanto, tengo derecho a decir que César es más nuestro que de ustedes, designado así por nuestro Dios".

STEVE: No es de extrañar que el imperio no compartiera esa opinión. Para decirlo de manera sencilla, los cristianos no eran apreciados. Sin embargo, lograron tomar ventaja de los tiempos y de las condiciones brindadas por el Imperio Romano para extenderse rápidamente. A lo largo de sus primeros 300 años se estableció una presencia en la mayoría de las partes del Imperio y alrededor de todas las clases y fronteras sociales. En nuestro próximo programa analizaremos con mayor detalle la propagación de la fe.