El Lenguaje Global del Pentecostalismo

Revista Historia Cristiana, Número 58

El Lenguaje Global del Pentecostalismo

Entrevista con Walter J. Hollenweger

No son lenguas, sino una forma diferente de ser Cristiano.

¿Por qué es tan popular el Pentecostalismo? Tiene casi medio billón de habitantes en todo el mundo, y ha sido y continúa siendo el movimiento Cristiano de más rápido crecimiento en el mundo. Ha hecho incursiones no solo en regiones del tercer mundo como África y América Latina, sino que también sigue atrayendo a muchos seguidores en los Estados Unidos y Europa.

¿Qué es un Pentecostal?

En todo el mundo hay tanta variedad que todo lo que uno puede decir es que un Pentecostal es un Cristiano que se llama a sí mismo Pentecostal. Aunque los Estadounidenses tienden a enfocarse en el don de lenguas, los Pentecostales en general enfatizan que Dios ha dado varios dones, no solo hablar en lenguas sino también sanidades y los así llamados dones racionales como la organización o la construcción de una escuela. Diversos dones para personas diversas. No es una definición estrictamente teológica sino fenomenológica.

¿Por qué hablar en lenguas es el enfoque en los Estados Unidos?

Hay muchas razones, por supuesto, pero una es que las culturas Estadounidenses y otras de clase media, como en Suiza, encuentran que las lenguas son un fenómeno extraordinario, por lo que estas experiencias reciben mucha atención. En África o en México, por otro lado, hablar en lenguas y las sanidades no se considera extraordinario—incluso pueden encontrar eso en algunas religiones paganas indígenas. (Hablar en lenguas no es ni siquiera "sobrenatural", como muchos Pentecostales lo han descubierto). Las lenguas ni siquiera se hablan en muchas iglesias Pentecostales del tercer mundo. En cambio, los Pentecostales del tercer mundo se centran en el culto compartido, en el canto y en la educación Cristiana. Los Pentecostales Estadounidenses no buscan la educación tanto como una experiencia de lo sobrenatural.

Nuestro problema abarca el Pentecostalismo hasta alrededor de 1950. ¿Cuáles han sido los cambios clave en el Pentecostalismo desde entonces?

Primero, cada vez más jóvenes Pentecostales se están convirtiendo en académicos a través de universidades acreditadas. Esto es cierto para los Pentecostales de Europa, de los Estados Unidos y de América Latina. También es cierto para África y Asia.

Ahora hay varios centenares de jóvenes Pentecostales estudiosos con doctorados, y eso, por supuesto, cambia la amplitud y la profundidad del Pentecostalismo. La mayoría de ellos han mantenido sus raíces en el Pentecostalismo, por lo que ahora son bilingües. Pueden hablar el idioma de la universidad, el idioma de conceptos y definiciones, pero también pueden hablar el idioma oral del Pentecostalismo, y creo que es una parte extremadamente importante de su éxito.

En segundo lugar, este aumento de la educación ha llevado a una apertura más ecuménica en muchos lugares. En el pasado, nadie quería hablar con los Pentecostales, y los Pentecostales no querían hablar con ninguna de las otras iglesias porque las veían como una causa perdida. Ahora, por ejemplo, hay un diálogo mundial entre los Pentecostales y los Católicos que ha estado ocurriendo durante 20 años. También ha habido muchos contactos con el Consejo Mundial de Iglesias, y el último ejemplo es un diálogo global con las iglesias Presbiterianas.

David du Plessis, un pionero del ecumenismo, ha sido fundamental en ambos cambios. Fue con los Católicos. Fue con el Consejo Mundial de Iglesias. Fue a todas las universidades. Y el hecho de que él fuera un hombre razonable y también un Pentecostal sorprendió a mucha gente. Ellos pensaban que los Pentecostales estaban un poco locos y que no podían pensar bien. Pero cuando llegaron a conocerlo, se dieron cuenta de que es posible hablar en lenguas y ser un erudito crítico.

Otro cambio, por supuesto, es el crecimiento explosivo en todo el mundo a casi medio billón de adherentes. ¿Por qué es tan popular el pentecostalismo?

Algunos estudiosos piensan que esto tiene que ver con su teología y con su doctrina. Pero la teología Pentecostal no es homogénea. Otros piensan que esto se debe al evangelismo agresivo de los Pentecostales. Eso es parcialmente cierto porque un verdadero Pentecostal es, por definición, un evangelista, cuya fe es tan contagiosa como la gripe.

La razón más importante es que esta es una religión oral. No está definida por el lenguaje abstracto que caracteriza, por ejemplo, a los Presbiterianos o a los Católicos. El Pentecostalismo se comunica en historias, testimonios y canciones. El lenguaje oral es un lenguaje mucho más global que el de las universidades o que las declaraciones de la iglesia. La tradición oral es flexible y puede adaptarse a una variedad de circunstancias.

¿No puede la tradición oral derivar en creencias sub-Cristianas e incluso heréticas?

Ciertamente, pero en general hay un consenso evangélico básico entre los Pentecostales. Son similares a la iglesia primitiva en este aspecto. Los primeros Cristianos no tenían una confesión de fe formal y escrita, como la tienen hoy los Presbiterianos y otros. Ellos tenían las historias de Jesús. Incluso Jesús no explicaba doctrina; les daba a sus seguidores historias de milagros, y les enseñaba a través de proverbios y parábolas.

La iglesia primitiva estaba unida, pero no tanto a través de su teología como a través del Padrenuestro, de la colección de Pablo para Jerusalén (sus "enemigos" teológicos), del bautismo y de la Eucaristía. Sus declaraciones de fe eran simples, y la más simple era "Jesús es el Señor." Ésta era una forma muy diferente de lograr la unidad, y ésta se logró a través de estas formas orales.

Irónicamente, cuando las confesiones ecuménicas llegaron más tarde, éstas no unieron a la iglesia. La dividieron, como siempre lo hace la teología proposicional. Pero a través de la teología dividida, es posible orar juntos, cantar juntos y actuar juntos. Eso es lo que mejor hacen los Pentecostales.

¿Es justo decir que cuando te conviertes al Pentecostalismo, no te estás convirtiendo a una determinada teología sino a una nueva experiencia de fe?

Sí, y eso tiene importantes consecuencias evangelísticas para los Pentecostales.

En muchos círculos, cuando te conviertes en Cristiano, hablas de obtener una nueva comprensión de la Cena del Señor y del bautismo (son más o menos sacramentales), pero otras personas no están terriblemente interesadas en eso. Cuando te vuelves Pentecostal, hablas de cómo has sido sanado o de cómo ha cambiado tu vida. Eso es algo de lo que los Pentecostales hablan una y otra vez, en parte porque la gente está interesada en escuchar ese tipo de cosas.

El pentecostalismo hoy se dirige a toda la vida, incluida a la parte del pensamiento. Más formas principales del Cristianismo primero abordan la parte del pensamiento y eso a menudo afecta el resto de la vida, pero no siempre.

Sin embargo, parece que la mayoría de los Pentecostales están más orientados hacia la parte derecha del cerebro e intuición que a su parte izquierda y racional.

De hecho, la "oralidad" del Pentecostalismo—cantar, bailar, hablar en lenguas—acentúa lo intuitivo. Pero un Pentecostal maduro intentará conectar lo intuitivo y lo racional. Siempre enfatizando que lo analítico destruirá la fe. Pero enfatizar solamente lo intuitivo conduce al caos. Un desafío del movimiento Pentecostal es combinar el pensamiento racional con su lado emocional espontáneo.

Este es el desafío para todos los Cristianos, realmente. El racionalista necesita la Bendición de Toronto y tiene que morir en el Espíritu para darse cuenta de eso. A veces me parece tonto, pero notarán que los racionalistas y los intelectuales son quienes caen. Las personas que tienen una vida emocional e intuitiva equilibrada no necesitan eso. Es cierto que algunos racionalistas bailan, cantan, van caminando por las montañas o tocan un instrumento musical, pero luego vuelven a su ciencia, a vidas racionales, y las dos no están conectadas.

¿Qué es lo que más le preocupa al pensar en el Pentecostalismo del próximo siglo?

Primero, el Pentecostalismo debe enfrentar su tendencia a segregarse y separarse en incontables denominaciones. Está sucediendo todo el tiempo, y realmente es un escándalo.

El otro desafío es común para todas las iglesias Cristianas: ¿qué hacemos con la amenaza ecológica para el mundo? ¿Qué hacemos con la amenaza del hambre y la difícil situación de los refugiados? Es un desafío que afectará más duramente a los Pentecostales que a cualquier otra iglesia porque sus iglesias más grandes están en el lado pobre del mundo. Pero como Cristianos, tenemos una contribución que hacer, no solo en dinero sino en oración y en el desarrollo de soluciones que los políticos no pueden plantear.

Pero los Pentecostales no son conocidos por su activismo social.

Eso es cierto en algunos aspectos, pero es un concepto erróneo en otros. Muchos de los manifestantes de Martin Luther King eran Pentecostales negros. En Brasil hay muchos pentecostales sentados en el parlamento. Y en muchos países del tercer mundo, los pentecostales están tratando de desarrollar nuevas formas de ganar influencia política sin el juego que tenemos en Occidente. En América Latina, por ejemplo, ellos intentan trabajar con sectores de la iglesia Católica para obtener agua, una escuela o una calle nueva para un distrito pobre. Así que hay un buen número de lugares donde los Pentecostales abordan problemas estructurales, pero no los defienden fundando partidos políticos. Comienzan por las necesidades locales y la miseria local que experimentan las personas todos los días.

Walter J. Hollenweger es el principal experto sobre el Pentecostalismo mundial, el cual ha estado estudiando durante más de 40 años. Habiendo crecido en la iglesia Pentecostal, más tarde se ordenó en la Iglesia Reformada de Suiza. De 1965 a 1971 fue secretario ejecutivo del Consejo Mundial de Iglesias, luego se desempeñó como profesor de misión en la Universidad de Birmingham en Inglaterra durante 18 años. Su libro seminal Los Pentecostales (Hendrickson, 1972) recientemente fue continuado por Pentecostalismo: Orígenes y evolución mundial (Hendrickson, 1997).