El Protestantismo Estalla en América Latina

Revista Historia Cristiana, Número 35

El Protestantismo Estalla en América Latina

Por Samuel Escobar

¿Por qué una región tradicionalmente Católica se está volviendo Protestante?

DESDE COLÓN, el Catolicismo Romano ha dominado la historia y la cultura de América Latina. El Protestantismo era prácticamente desconocido en la región hasta el siglo pasado, y luego solo fue conocido de manera marginal.

Pero a partir de la década de 1940, el Protestantismo comenzó a proliferar en América Latina. En 1938, los Protestantes sumaban alrededor de 600,000. Una década más tarde se habían multiplicado por cinco a 3 millones. Otra explosión ocurrió en los últimos veinte años—de 15 millones a más de 40 millones.

Para entender las causas históricas de esta extraordinaria transformación, Historia Cristiana se sentó con Samuel Escobar, profesor Thornley B. Wood de Misiología en el Seminario Teológico Bautista del Este de Filadelfia, Pennsylvania.

Historia Cristiana: ¿Cómo era la vida religiosa en una ciudad típica de América Latina hace 400 años?

Escobar: En los años 1600, la vida de la ciudad estaría determinada por la iglesia. Los Españoles plantaron sus iglesias en la plaza principal, justo al lado del edificio del gobierno. La presencia de la iglesia se sentía en todas partes.

Por ejemplo, la gente medía el tiempo por medio de las campanas de la iglesia. Cuando sonaban las campanas a la primera hora de la mañana, sabías que era justo antes de las seis—para la misa de la mañana. Cuando sonaban a la última hora de la tarde, eran casi las cuatro—tiempo para orar.

El calendario también estaba gobernado por la iglesia. Además de la Semana Santa y de la Navidad, se organizaban festividades elaboradas en cada país (y en muchas ciudades) para honrar a su santo patrón. En Perú, era a Santa Rosa el 30 de agosto, y en México, a la Virgen de Guadalupe el 6 de diciembre.

La vida intelectual también estaba completamente controlada por la iglesia. Cada libro leído y cada enseñanza ofrecida serían revisados. La Iglesia Católica controlaba casi todas las esferas de la vida.

¿Dónde estaban los protestantes de América Latina en este momento?

El control de la iglesia era tan fuerte, que casi ningún protestante podía sobrevivir. Incluso tan tarde como en el siglo XIX, encontramos historias como esta: un Estadounidense visita un pequeño pueblo de Argentina durante una procesión religiosa. Todo el mundo se arrodilla, por supuesto, excepto este Estadounidense. Como resultado, es golpeado públicamente, encarcelado y dejado allí durante meses, simplemente porque no se arrodilló.

El reformador Juan Calvino envió a dos misioneros Protestantes a Brasil en 1556, pero ese experimento fracasó casi de inmediato. Los Holandeses ocuparon el noreste de Brasil durante unos treinta años. También había colonias Luteranas experimentales en Venezuela. Pero estos son casos aislados.

¿Cómo se compara la vida religiosa en una ciudad moderna de América Latina?

La sociedad se ha vuelto cada vez más secularizada. Cuando los países celebran su independencia de España, por ejemplo, también lo ven como una ruptura con el rígido control Católico. En algunos países, la secularización ha llegado a un extremo. En Uruguay, la Navidad es llamada "Semana Familiar", y la Semana Santa es llamada "Semana del Turismo".

Otro ejemplo: la legislación de la planificación familiar recientemente ha desaparecido en Perú y en México. En cada país, la iglesia Católica trató de disuadir a los funcionarios del gobierno de perseguir dicha legislación. Cuando ese intento falló, la iglesia comenzó una campaña mediática en contra de la anticoncepción. Esto mostró claramente que la voz de la iglesia ya no determinaba la política del gobierno.

A esto se añade el gran porcentaje de Católicos que practican el control de la natalidad, y puedes darte cuenta de que el Catolicismo no puede ejercer su dominio anterior sobre sus miembros, y mucho menos sobre las instituciones sociales.

Entonces ¿hoy existe mayor libertad para no ser Católico?

Esa es otra nueva realidad: la competencia religiosa. En los años 1600, el Catolicismo Romano tenía un monopolio. Hoy en día, la mayoría de los países honran la libertad religiosa. Éste es un mercado religioso abierto.

Puedes ver esto especialmente en los medios masivos. El Protestantismo fue pionero en el uso de los medios con fines religiosos, especialmente en la radio con la apertura de la estación de radio HCJB de Ecuador en la década de 1930. La iglesia Católica reaccionó, y particularmente en Brasil desarrolló una fuerte red de radio. Pero tal competencia abierta era impensable hace 400 años.

En América Latina, todavía hay una presión social abrumadora para permanecer en el Catolicismo, pero la iglesia ha perdido los medios de ejercer presión política para imponer la conformidad.

¿Cuándo entró por primera vez el Protestantismo en América Latina?

No fue hasta principios de 1800, cuando las naciones Latinoamericanas se liberaron de España y de la iglesia española. Fue entonces cuando pioneros como James Thomson comenzaron su trabajo.

Patrocinado por la Sociedad Bíblica Británica y Extranjera, Thomson vino de Inglaterra a Buenos Aires en 1816 y trabajó hasta 1827. Pasó de Argentina a Uruguay a Chile a Perú a México, justo cuando estos movimientos de independencia estaban comenzando.

Él no estaba tan interesado en establecer iglesias Protestantes como en promover la lectura de la Biblia dentro de la iglesia Católica. En cada ciudad él encontraba un grupo de sacerdotes que estaban interesados ​​en promover la lectura de las Escrituras, e incluso creó una sociedad Bíblica en Colombia.

A fines de siglo, tenemos al famoso Francisco Penzotti, un italiano analfabeto que llegó a Uruguay, lugar donde se convirtió. Comenzó a leer y a estudiar, se hizo vendedor ambulante de libros religiosos, ofreciendo material devocional y viajó por toda América Latina en la década de 1880, llevando consigo Biblias. Viajó pueblo por pueblo a caballo, desde Argentina hasta Bolivia, y luego a Perú. En muchos lugares, Penzotti fue el fundador o uno de los fundadores de la Primera Iglesia Metodista de la ciudad.

Una vez que fue encarcelado en Perú debido a su Protestantismo. Un viajero estadounidense le tomó una foto allí, y ésta fue publicada en un periódico de Nueva York. Debido a la herencia italiana de Penzotti y a su conexión con la Sociedad Bíblica Americana, el incidente se convirtió en un escándalo internacional. Esto atrajo la atención de la gente hacia la intolerancia religiosa de América Latina, y abrió las puertas para una mayor libertad religiosa ahí.

¿Cómo han evangelizado los protestantes en América Latina?

Los Católicos se dirigían a las élites. Ellos creían que, si alcanzas a las élites y las educas, el resto de la sociedad seguirá.

Los Protestantes ponían su mirada en la gente. James Thomson es un buen ejemplo.

Thomson era un miembro de la Sociedad Lancasteriana, que había surgido en una Inglaterra que se estaba industrializando rápidamente. Allí, multitudes de niños acudían a las escuelas de la ciudad, y no había suficientes profesores. ¿Qué haces entonces? Tomas a los mejores estudiantes y los conviertes en mentores de los demás, multiplicando el efecto del maestro. En la década de 1820, el sistema de Lancaster era la última palabra en educación.

Thomson se convirtió así en un asesor educativo de muchos de los líderes de la independencia. Él les decía: "Estás iniciando tu vida como una nación independiente y democrática. Te ofrezco un método para educar no a las elites sino a las masas".

¿Por qué el Protestantismo comenzó a proliferar en las décadas de 1940 y 1950?

En términos generales, el cambio en las estructuras sociales causa un cambio significativo en el comportamiento de las personas. En el caso de América Latina, el significativo cambio estructural fue la reforma agraria.

En Bolivia, por ejemplo, la tierra se redistribuyó en 1952. Ese fue el año en que observamos un crecimiento Protestante significativo entre las tribus Aymaná y Quechua, las comunidades indígenas de Bolivia y Perú que descendían de los Incas. ¿Por qué? Antes de que la gente poseyera su tierra, tenían que ir a la iglesia Católica local porque el propietario era Católico; ésta era la única iglesia que él permitiría en su territorio. Después de la reforma agraria, nadie tenía tierras suficientes para controlar el entorno religioso, por lo que la elección se hizo una realidad.

Casi al mismo tiempo, más y más personas comenzaron a mudarse a las ciudades. En las aldeas, el sacerdote Católico sigue siendo una persona clave. Él sabe a dónde va la gente y qué hacen. Un Protestante tiene dificultades para conseguir conversos debido a la coacción social.

En la ciudad, ninguna iglesia puede controlar todo lo que sucede. Entonces, cuando las personas se mudan a la ciudad, son más libres de elegir su propia religión.

¿Qué hace que el Cristianismo Protestante atraiga a los Latinoamericanos de hoy?

Ellos ven un Cristianismo que acepta su cultura. Los Protestantes, los Pentecostales en particular, se han adaptado mejor a la mentalidad Latinoamericana.

Chile tiene la denominación Pentecostal más grande de América Latina: la Iglesia Metodista Pentecostal. Comenzó a principios de este siglo cuando Willys Hoover, un Metodista, tuvo una experiencia Pentecostal y comenzó un ministerio de sanidad. La Iglesia Metodista no pudo manejar esto, por lo que eventualmente se marchó y formó la Iglesia Metodista Pentecostal.

Estos Pentecostales Metodistas eran menos dependientes de las prácticas de la iglesia Norteamericana. Crearon sus propios himnos, predicaban con un estilo latino, eran más expresivos en la adoración. Esta iglesia creció rápidamente. La Iglesia Metodista que dejaron tiene solo 8,000 miembros hoy. La denominación que brotó a partir de ella tiene 800,000.

En segundo lugar, el Protestantismo ayuda a las personas a organizar sus vidas. Las personas marginadas tienden a tener dificultades para conservar sus trabajos, controlar el consumo de alcohol y mantener a las familias intactas. Los Pentecostales han ido a las secciones más pobres de las ciudades y les han llevado a estas personas un Cristianismo centrado en la Biblia. Ellos han logrado que las personas dejen de beber y les han enseñado a leer y a tomarse en serio las responsabilidades familiares. En consecuencia, el Protestantismo ha creado una movilidad ascendente. A medida que las personas se vuelven más auto disciplinadas y responsables, comienzan a convertirse en líderes en sus negocios y comunidades.

Además, tales iglesias se convierten en lugares donde las personas que son nadie pueden convertirse en alguien. Las personas cuya voz no importa en la sociedad pueden profetizar en la iglesia.

Al mismo tiempo, se crean redes. En una iglesia de mil miembros, un fenómeno no poco común hoy en América Latina, la gente tiene muchos contactos. Un hombre de negocios atraerá naturalmente a muchas de estas personas como clientes. O si pierdes tu trabajo, es probable que alguien de esa iglesia pueda darte uno nuevo.

Además, el Protestantismo es tremendamente flexible. En el Catolicismo, necesitas un sacerdote para administrar la Comunión, el elemento más importante de la fe Católica. Los Protestantes solo necesitan una Biblia y quizás un himnario. Y cualquiera puede predicar o liderar el canto.

Si a eso le sumamos los dones espirituales que los Pentecostales enfatizan, como la sanidad, tienes un poderoso catalizador para que las personas se vuelvan Protestantes.

¿Cuáles son las debilidades en el Protestantismo Latinoamericano contemporáneo?

Quizás la más preocupante es la tendencia a ser dualista. Especialmente en el Pentecostalismo, el mundo se ve principalmente como una lucha entre la luz y la oscuridad, entre la iglesia y el mundo. Pronto los gobiernos se convierten en la obra del Diablo o en la visitación de Dios.

Un sociólogo Bautista estudió los sermones de los pastores Pentecostales en Chile. Señaló que cuando el dictador militar Augusto Pinochet derrocó al marxista Salvador Allende, los Predicadores decían que el Ángel de Jehová había venido a expulsar al Diablo de la nación. Por lo tanto, los Pentecostales a veces pueden ser manipulados con fines políticos.

El crecimiento protestante en América Latina hoy es fenomenal. ¿Es una nueva Reforma?

Hasta cierto punto. Al igual que en el año 1500 del norte de Europa, un renacimiento espiritual y teológico está teniendo grandes consecuencias sociales y políticas dentro de un entorno Católico.

Sin embargo, hay una mejor analogía histórica: los avivamientos bajo John Wesley del siglo XVIII. Esos avivamientos Wesleyanos tuvieron lugar durante un período de rápida industrialización y urbanización en Inglaterra. La industria y las áreas urbanas están creciendo rápidamente en este siglo en América Latina, y una vez más, el Protestantismo está ayudándoles a las personas a hacer ajustes.

Esa comparación, de hecho, me da esperanza para América Latina. Los avivamientos Wesleyanos permitieron un cambio social positivo sin que los pobres tuvieran que recurrir a la violencia. Dado el poder del Protestantismo para mejorar las vidas de las personas, veo la posibilidad de que también ocurra un cambio social pacífico en América Latina.