Modificación Corporal por David Feddes
Modificación Corporal por David Feddes
Las salas de piercings son una industria en crecimiento. Por una tarifa, puedes hacerte perforaciones en los labios, cejas, lengua, nariz, ombligo y en otras partes del cuerpo más privadas. Después puedes comprar joyas para usarlas en las perforaciones. Las perforaciones son cada vez más comunes, especialmente entre los más jóvenes. Los tatuajes también son populares. Puedes hacerte solo un pequeño tatuaje, si lo deseas, pero también puedes conseguir muchos tatuajes que cubran porciones importantes de tu cuerpo. Las perforaciones, los tatuajes y otras formas de modificación corporal van en aumento.
¿Por qué tanta gente quiere hacerse modificaciones corporales? Para algunos, las modificaciones corporales son una opción de moda. Si tus amigos o estrellas favoritas se las hacen, es posible que tú también quieras hacértelas. Te hacen sentir más elegante o sexy. Un joven dice: "Solo pensé que sería genial tenerla. No lo hice para ser un rebelde ni nada por el estilo. De seguro podría tener mejores ideas que esa para rebelarme". Algunas personas eligen la modificación corporal simplemente porque les da la gana, sin saber por qué. Cuando a una mujer que iba a la iglesia con su esposo e hijos le preguntaron por qué se había perforado el ombligo, ella respondió: "No sé exactamente por qué quería tenerla. Tengo esta cierta imagen de mamá futbolística, que va a la iglesia y a la escuela, y la argolla del vientre es una manera de mostrar un lado diferente".
Otras personas no eligen la modificación corporal tan casualmente. Significa mucho más para ellas. Muchos usan la modificación corporal como una forma de lidiar con el dolor interno y tomar el control. Una mujer, Laura, dice: "Mi experiencia ha sido que muchas personas que optan por la modificación corporal han salido de una infancia abusiva. Yo pienso acerca de mis piercings y tatuajes como una manera de reclamar (o remarcar) mi cuerpo para ¡mi misma!"
Para otras personas, la modificación corporal es nada menos que su forma de revelar su alma y conectarse con el reino espiritual. Saben que las perforaciones, los tatuajes y las formas más extremas y dolorosas de modificación corporal eran comunes entre los pueblos tribales y entre las religiones paganas, y quieren la misma experiencia tribal y religiosa para sí mismos. Un entusiasta de la modificación corporal dice,
La perforación corporal y los tatuajes son rituales sagrados. A través de estos medios podemos personalizar nuestros cuerpos y proclamar públicamente que tenemos el control de nuestros destinos. Cualquier búsqueda espiritual exige sacrificio si tiene sentido. El dolor de un piercing o de un tatuaje es el camino para la transformación. Si no dolió y no fue difícil, no significaría nada. Para mí, un tatuaje es la encarnación de mi espíritu y de mi alma, así como un paso importante en mi búsqueda espiritual.
La modificación corporal no solo es vista como parte de un viaje espiritual personal, sino que es considerada una forma de salvar a la tierra. Como dice uno de los miles de sitios web dedicados a la modificación corporal, "a través de las artes tribales perdidas, creemos que podemos reclamar nuestro respeto olvidado y la comprensión de la naturaleza al simbolizar que el cuerpo es sagrado al igual que nuestro planeta madre tierra".
Incluso hay un grupo que se nombra la Iglesia de la Modificación Corporal. Es reconocido oficialmente por el gobierno como una religión. No tiene doctrina de un Dios Creador. En cambio, enseña que nosotros creamos un mundo de nuestra propia elección. La declaración de la misión de la Iglesia de la Modificación Corporal declara,
"Cada uno de nosotros somos sabios en nuestros razonamientos. Cada uno de nosotros somos poderosos en autoridad sobre nosotros mismos. Nuestros cuerpos son la estructura física, nuestro templo, el embalaje de nuestros propios sueños y experiencias personales, de nuestras creencias y nuestras esperanzas. Nos plantamos en nuestro derecho de propiedad de nuestros cuerpos individuales ... Juntos ahora compartimos un Nuevo Mundo de nuestra propia creación".
Ahora, si tienes una argolla en la ceja o en el ombligo solo porque te parece genial, algunas de estas otras razones para la modificación corporal pueden sonarte extrañas. Si estás viviendo una vida dócil y segura y quieres un poco de modificación corporal solo para animarte un poco, puede sonar extraño que algunas personas vean la modificación corporal como una respuesta a la angustia interior y a un pasado abusivo. Si crees que tener un piercing o tatuarte incluye dolor solo como un desafortunado efecto secundario, puede sonar extraño que muchas personas realmente quieran el dolor y lo acepten como un sacrificio sagrado. Si no ves ningún significado religioso en la modificación corporal, puede sonar extraño escuchar acerca de la modificación corporal como una religión. Pero, ¿qué ocurre si las personas que hacen una religión a partir de ella realmente entienden mejor que tú el significado de la modificación corporal?
Lenguaje Corporal
El lenguaje corporal habla en voz alta. Los cuerpos se comunican. La forma en que tratamos nuestros cuerpos dice mucho sobre nosotros y sobre lo que adoramos. Los discípulos incondicionales de la modificación corporal lo entienden. Rechazan al Dios Creador y al Señor Jesucristo de la Biblia. Eligen la religión tribal o la auto adoración en su lugar. Y muestran su religión a través de lo que le hacen a sus cuerpos.
Mientras tanto, algunas de las prácticas más leves de la modificación corporal se están volviendo comunes entre los jóvenes que asisten a la iglesia. No ven nada malo en eso, y sus padres no están muy seguros de qué decir. Muchos papás y mamás realmente no quieren que les hagan perforaciones o tatuajes a sus hijos. Pueden pensar que un niño con cejas de acero, orificios nasales enjoyados, lengua adornada con clavos y ombligo metálico se ve bastante loco. Pueden temer que un tatuaje que atrae a un niño de diecisiete años parezca bastante tonto cuando la persona tenga cuarenta años. Pero no están seguros de si existe alguna objeción moral o espiritual ante la modificación corporal. Los padres no saben si la modificación corporal realmente es equivocada o si es una moda inofensiva para una nueva generación.
Incluso la mayoría de los predicadores guardan silencio acerca de la modificación corporal. ¿Por qué preocuparse tanto por los niños que se hacen algunos agujeros extra en su cuerpo y que usan joyas en lugares extraños? ¿No hay problemas más importantes con los que lidiar? Si un predicador critica el piercing o los tatuajes, los jóvenes simplemente se desanimarán y les será más difícil aceptar a Cristo y ser parte de la iglesia. Como pastor y padre, no quiero hablar en contra de algo simplemente porque no me conviene. Sé que Dios mira el corazón, no solo las apariencias externas.
Pero tenemos que preguntarnos: ¿la modificación corporal es solo una cuestión de moda? ¿Es solo una moda reciente? No, no es una moda nueva en absoluto. Tiene raíces muy antiguas, y esas raíces se adentran en la religión pagana. A lo largo de la historia, la modificación corporal ha sido común en culturas que adoran ídolos o a la naturaleza, a la madre tierra o a uno mismo. Los tatuajes, las perforaciones, los cortes, las marcas, las cicatrizaciones y las mutilaciones han sido parte de las religiones paganas durante miles de años.
Cada vez que el mensaje de la Biblia llegaba a una sociedad pagana, cada vez que más y más personas confiaban en el Dios verdadero y lo adoraban, la modificación corporal disminuía y casi desaparecía. Las personas que creían en la Biblia y confiaban en Jesucristo entendían que Dios había creado su cuerpo, que Cristo había pagado por su cuerpo con su sangre, y que el Espíritu Santo de Dios vivía en su cuerpo. Su cuerpo no era suyo sino de Dios. Era un error dañarlo, desfigurarlo o distorsionarlo. Su cuerpo era atesorado como obra de Dios y era ofrecido a Dios para su honor. A medida que la verdad Cristiana reemplazaba al paganismo, ésta movía a las personas a abandonar la modificación corporal pagana.
La modificación corporal no es solo un nuevo estilo. Es el lenguaje corporal para un cambio religioso, un alejamiento del Cristianismo bíblico hacia la religión pagana y hacia las prácticas sexuales paganas. Las principales figuras del reciente resurgimiento de la modificación corporal son personas que detestan el Cristianismo y que se deleitan con las viejas prácticas paganas de dolor auto infligido y sexualidad pervertida. Otras personas pueden subirse al tren de la modificación corporal sin ser conscientes de sus raíces paganas y de los paganos modernos que la están dirigiendo. Pero si sabemos lo que realmente está sucediendo y lo que dice la Biblia acerca de estas cosas, sabremos que la modificación corporal no es de Dios.
Tu cuerpo envía señales. Lo que le haces a tu cuerpo y lo que te pones (o no te pones) envía un mensaje. Una chica que se viste como Lady Gaga está enviando el mensaje: "Soy un objeto sexual que sigue a MTV, no a la Biblia". La Biblia dice: "Que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia" (1 Timoteo 2:9). Un niño con joyas o cabello como el de una niña está enviando el mensaje: "No sé lo que soy, y prefiero ser un mezclador de género que obedecer a la Biblia". En la Biblia, Dios no solo se opone a la actividad homosexual, sino que también se opone al lenguaje corporal que difumina la diferencia creada entre el hombre y la mujer. El Antiguo Testamento, dice: "No vestirá la mujer traje de hombre, ni el hombre vestirá ropa de mujer; porque abominación es a Jehová tu Dios cualquiera que esto hace" (Deuteronomio 22:5). En el Nuevo Testamento, Dios insiste en que los hombres y las mujeres respeten la diferencia entre sexos, incluso en su peinado o en la cobertura de la cabeza (1 Corintios 11:2-16).
Ahora, si tu cuerpo envía señales a través de la ropa y del arreglo personal, entonces hacer modificaciones permanentes a tu cuerpo envía una señal aún más fuerte. Cuando a tu cuerpo le haces cosas que siempre han marcado a los paganos, estás enviando el mensaje de que favoreces el paganismo sobre el Cristianismo. Incluso si no tienes la intención de enviar ese mensaje, eso es lo que tu cuerpo está diciendo.
La Biblia enseña una perspectiva diferente sobre el cuerpo de lo que enseñan los paganos, y Dios le ordena a su pueblo que trate sus cuerpos de forma diferente a como lo hacen los paganos. En la época de Moisés, Dios ordenó: "No haréis rasguños en vuestro cuerpo por un muerto, ni imprimiréis en vosotros señal alguna" (Levítico 19:28). Los sacerdotes de Dios, especialmente, no debían cortar sus cuerpos (Levítico 21:5). Los paganos hacían ese tipo de cosas, y Dios no quería que su pueblo imitara a los idólatras. Moisés declaró: "Hijos sois de Jehová vuestro Dios; no os sajaréis, ni os raparéis a causa de muerto. Porque eres pueblo santo a Jehová tu Dios, y Jehová te ha escogido para que le seas un pueblo único de entre todos los pueblos que están sobre la tierra" (Deuteronomio 14:1-2).
Siglos más tarde, el profeta Elías tuvo un enfrentamiento con los sacerdotes de un ídolo llamado Baal. Cuando estos sacerdotes paganos trataron de atraer la atención de su ídolo y hacer descender su poder, "clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la sangre sobre ellos " (1 Reyes 18:28). Pero el profeta del Señor, Elías, no hizo tal cosa. No le hacían falta piercings, tatuajes o cortes. Elías oró simplemente hablando con Dios, y el Señor respondió su oración de una manera poderosa.
Dios toma el lenguaje corporal en serio. Él no quiere que profanemos nuestros cuerpos como adoradores de ídolos. Si crees que el lenguaje corporal no importa, estás fuera de sintonía con la Palabra de Dios. Algunas personas de la iglesia que buscan lagunas para permitir la modificación corporal pueden enfatizar la libertad Cristiana. Pero la Biblia dice: "No uséis la libertad como ocasión para la carne " (Gálatas 5:13). Algunos podrían decir que los tiempos cambian y que algunas partes de la Biblia abordan distintos problemas culturales que los que enfrentamos hoy en día. Tal vez sea así. Es posible que no siempre sepamos exactamente cómo aplicar una regla bíblica en un nuevo escenario. Pero, ¿realmente este tema es poco claro? ¿Realmente el paganismo y la perversión son tan diferentes hoy en día que en el mundo antiguo? ¿Dios quiere que imitemos ahora lo que los paganos les hacen a sus cuerpos? ¿Dios ha decidido de repente que es hora de difuminar la diferencia entre los Cristianos y los incrédulos?
No, si perteneces a Cristo, tu lenguaje corporal debería decirlo. La Biblia dice: "¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo" (1Corintios 6:19-20). Tu cuerpo es creación de Dios que debe celebrarse, no tu propio objeto privado que debe manipularse. Si eres Cristiano, tu cuerpo es comprado por Jesús. El Espíritu Santo vive en él como su templo. Si tu cuerpo es el templo del Espíritu Santo, entonces brilla con su luz. No hagas que el templo de Dios parezca una copia del templo de Satanás.
Deja que tu lenguaje corporal proclame que eres hijo del Padre, comprado por Cristo el Hijo, lleno del Espíritu Santo. No preguntes por aquello en lo que Dios te permitirá salirte con la tuya. Pregunta cómo puedes honrar a Dios con tu cuerpo. Si buscas lagunas en la Biblia para que puedas hacer tu voluntad, podrías decir: "¿Qué tiene de malo?" Más bien pregunta: "¿Qué es correcto?" ¿La modificación corporal honra a Dios y te marca como un seguidor santo de Jesús? Si no, no lo hagas.
Ahora, sé que no todas las personas que optan por la modificación corporal planean deliberadamente luchar contra Dios o destruirse a sí mismas. Algunos son Cristianos genuinos. Tal vez confías en Jesús y lo amas, pero no has pensado mucho acerca del lenguaje corporal. Tal vez estés básicamente en lo correcto con Dios, pero solo necesitas un poco de enseñanza bíblica, corrección y formación en esta área de tu vida. Hasta ahora, tú no estabas realmente consciente del llamado de la Biblia para honrar a Dios con tu cuerpo, y no eras consciente del significado pagano de la modificación corporal. Bien ahora lo sabes. Si amas al Señor y crees en la Biblia, honra a Dios con tu cuerpo a partir de ahora. Asegúrate de que tu lenguaje corporal diga que perteneces a Cristo y que su Espíritu vive dentro de ti.
Odiando la Sabiduría, Amando la Muerte
No todas las personas que optan por la modificación corporal son Cristianos que solo necesitan una corrección leve. Muchos son anticristianos que necesitan dejar la oscuridad y la muerte para encontrar la luz y la vida. Muchos creadores de tendencias que ayudaron a popularizar la modificación corporal odian el Cristianismo bíblico y aman el paganismo. Algunos odian la creación de Dios respecto a hombres y mujeres, y prefieren la modificación de la mezcla de género. Algunos incluso odian la buena salud y aman el dolor en sí mismo.
El movimiento de modificación corporal incluye una creciente galería de horrores. La modificación corporal no se limita a la perforación y a los tatuajes. Otras formas más extremas también van en aumento. Los cortes, las marcas, las cicatrizaciones, incluso las mutilaciones y las amputaciones, son cada vez más frecuentes. Las personas que se cortan dicen que verse sangrar las hace sentir mejor. Un niño de 14 años dice que quiere perforar su lengua, nariz y más partes íntimas. "Realmente no sé por qué", dice. "En el pasado, descubrí que al infligirme dolor a mí mismo podía liberar mucha ira y emoción sin lastimar a nadie. Durante aproximadamente 4 meses, yo diría que era adicto al dolor, me cortaría los brazos con una navaja de afeitar o un cuchillo cada vez que me enojara".
Algunas personas tienen lo que se conoce como apotemnofilia, una palabra que literalmente significa "amor por cortar". Estas personas no se sienten completas o felices con los brazos y las piernas unidas a ellas, y envidian a las personas cuyas extremidades han sido amputadas. Algunos se cortan parte de un dedo o su propia mano. En Escocia, dos personas incluso convencieron a un cirujano para que les amputara las piernas. Sus piernas estaban perfectamente sanas, pero no querían piernas, por lo que el cirujano modificó sus cuerpos. El hospital detuvo al cirujano antes de que pudiera amputar las piernas de una tercera persona.
Para la mayoría de nosotros puede parecer obvio que es una locura amputar las piernas sanas. Pero muchos periodistas e intelectuales piensan que otro tipo de cirugía radical en cuerpos sanos está bien: retratan las operaciones de cambio de sexo de manera positiva. Un número creciente de mujeres desearían ser hombres y someterse a una cirugía para cortar algunas partes y agregar otras. Los hombres cuentan con el procedimiento opuesto para que puedan convertirse en mujeres. En un caso, un esposo y una esposa eligieron operaciones de cambio de sexo. Querían seguir casados, pero la esposa se convirtió en el marido y el marido se convirtió en la esposa. En la cobertura de los medios de información, la "comunidad transgénero" es simplemente otra parte colorida y saludable del paisaje cultural. ¿Pero los cirujanos que hacen operaciones de cambio de sexo son mejores que el cirujano que amputó las piernas sanas de alguien que se lo pidió?
Otra forma de modificación corporal que está en aumento es la auto inanición. Los médicos consideran que la anorexia es un trastorno alimentario que es peligroso, incluso mortal. Pero existe una creciente subcultura que elogia la anorexia y alienta a otras personas con trastornos alimentarios a "mantenerse fuertes" y a no seguir una dieta normal y saludable. La revista "Time" contó más de 400 sitios web en Internet que elogian y promueven la anorexia. Los creadores de estos sitios web se enorgullecen de no ser más que piel y huesos. Animan a otras personas quienes adoran la delgadez extrema y disfrutan de parecer esqueletos para mantener su búsqueda de "el cuerpo perfecto" y que no dejan que nadie los detenga—ni su médico, ni su familia, ni sus amigos, ni nadie. Es su propio control de su cuerpo. Es su propia idea de la belleza lo que importa. Cuanto más delgados, mejor, incluso si significa enfermedad y hambre.
Desde una edad temprana, la mayoría de nosotros no nos sentimos contentos con nuestro cuerpo y nos gustaría cambiarlo. Si los niños pequeños tienen ojos azules, desean tener ojos marrones. Si nacen con el pelo rojo, desean que fuera negro. Algunos niños desean ser niñas o viceversa. Algunos niños desean haber nacido en una raza diferente o tener un nombre diferente. Esta insatisfacción infantil con nuestro propio cuerpo siempre se consideró algo en lo que había que madurar y superar.
Pero hoy en día, en lugar de madurar por encima de las fantasías infantiles, los adultos complacen esas fantasías. Usan lentes de contacto que cambian su color de ojos, tintes que cambian el color de su cabello, tatuajes que los hacen parecer más a un cartel que a un ser humano, piercings que los hacen parecerse a sus favoritos paganos famosos, cirugía plástica para cambiar su rostro y su cuerpo. Los hombres usan aretes como hace algunos años solo lo hacían las mujeres; las mujeres eligen peinados y ropa para parecerse a los hombres. Millones de personas adoran a las estrellas del pop que usan ropa del sexo opuesto, y algunas personas se realizan operaciones de cambio de sexo para alterar su género por completo.
Parte de la sabiduría con madurez radica en aceptar el cuerpo que Dios te dio, aprender a vivir con él y honrar a Dios con él. Pero el espíritu de rebelión dice: "Soy el dueño de mi destino. Puedo modificar mi cuerpo como mejor me parezca". ¿Esto trae alegría y libertad? No, trae dolor, esclavitud, caos y muerte. En la Biblia, la sabiduría de Dios clama y dice: "El que me halle, hallará la vida, Y alcanzará el favor de Jehová. Mas el que peca contra mí, defrauda su alma; Todos los que me aborrecen aman la muerte" (Proverbios 8:35-36).
En el horrible misterio del pecado, la gente realmente ama la muerte. Los horrendos auto abusos, como la anorexia, el corte, la automutilación y la amputación, las cirugías de cambio de sexo y otros cambios extremos en el cuerpo son claramente casos de daño a uno mismo y de amor a la muerte. Pero incluso las formas más leves de modificación corporal, como los tatuajes y la perforación, apuntan hacia la misma dirección. Esa no es solo mi opinión. El "New York Times", apenas una fortaleza de la verdad Cristiana, ve un vínculo claro: "En una era de tatuajes y de argollas en la nariz, la automutilación es la última expresión del auto desprecio adolescente". El "Times" reconoce la relación entre la modificación corporal y el estimado de "dos millones de personas hiriéndose [a sí mismas] en secreto".
En la epopeya de John Milton, El paraíso Perdido, Satanás dice: "Mal, sé tú mi bien... Mejor reinar en el infierno que servir en el cielo". Ese es el grito de batalla de todos los que insisten en hacer su propia voluntad, incluso si esto los destruye. Una mujer dice con franqueza: "Mi principal atracción para la modificación corporal fue inicialmente el aspecto del control: ejercer control sobre mi cuerpo y hacer que mi cuerpo físico se ajustara a la visión mental y espiritual que tengo sobre él. Desafortunadamente, todo el aspecto del uso de la modificación corporal como forma de expresar el control huele increíblemente a automutilación".
Ofrezcan Sus Cuerpos a Dios
En lo profundo de cada uno de nosotros hay un sentimiento de pecado y falta de dignidad. Sentimos que merecemos sangrar y sufrir. Sentimos que de alguna manera necesitamos ser diferentes de lo que somos. Y es verdad: merecemos sangrar, y tenemos que ser diferentes. Pero la respuesta no es mutilarnos o tratar de remodelar nuestros cuerpos. Esa es la respuesta pagana a nuestra necesidad de expiación, pero la respuesta vivificante de Dios a nuestra necesidad de expiación es la sangre de Jesucristo. Él fue traspasado por nuestros pecados (Isaías 53:5). La sangre de Jesús derramada en la cruz tiene el poder de hacer lo que nuestro propio desangramiento no puede hacer. Su sangre lava el pecado como nada más puede hacerlo. Así que no cuentes con el dolor de la modificación corporal o con la sangre de la mutilación para lidiar con la culpa de tu pecado. Cuenta con Cristo. Cree en su sangre. Cuenta con su Espíritu Santo para que viva en ti y te transformarte a través del poder del amor de Dios.
Tu cuerpo necesita ser diferente, pero no de la forma en que la modificación corporal lo hace diferente. No es necesario agregar nuevas perforaciones en tu cuerpo. No es necesario tatuar nuevos diseños en él. No es necesario escapar del género en el que naciste. No es necesario remodelar tu cuerpo o tomar el control total de tu propio cuerpo. ¿Cómo necesita ser diferente tu cuerpo? Necesita ser gobernado por Dios en lugar de Satanás, estar dedicado a la santidad en lugar de la maldad. "Así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia... Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro" (Romanos 6:19,23).
Hay una gran diferencia entre el bautismo Cristiano y la modificación corporal pagana. El bautismo es indoloro y sin derramamiento de sangre. Cristo ya sufrió en mi nombre y proporcionó la sangre para mi lavamiento. He sido bautizado en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Mi Padre, el Creador, me dio un cuerpo creado maravillosamente (Salmo 139:14). El Hijo, mi Señor Jesús, pagó por mí, alma y cuerpo, al morir para pagar por mis pecados. Mi Consolador, el Espíritu Santo, vive dentro de mí y hace de mi cuerpo su templo. Mi bautismo sella estas cosas sin lastimar ni dañar mi cuerpo.
¡Cuán mejores son los caminos maravillosos de Dios que el abuso cruel de Satanás! Quiero cuidar bien de mi cuerpo y dejar que la vida limpia y saludable de Dios brille a través de él. ¿Por qué tratar de cambiar el cuerpo que mi Padre creó para mí? ¿Por qué actuar como si mi cuerpo fuera mío cuando Jesús lo compró y pagó por él? ¿Por qué estropear el templo del Espíritu Santo que vive en mí? ¿Por qué dejar que Satanás me fastidie cuando puedo disfrutar del amor y de la alegría del Dios Todopoderoso? La Biblia dice,
Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta (Romanos 12:1-2).
Preparado originalmente por David Feddes para Ministerios de Regreso a Dios Internacional. Usado con permiso.